"La Flauta Mágica", de Mozart.

Hace unas semanas, Pilar, la profesora de piano y solfeo de nuestros hijos, nos invitó a ir con ella al ver el ensayo general el día antes del estreno de "La Flauta Mágica" ya que ella es también la fotógrafa del evento. Le dije a los niños con mucho ánimo que qué les parecería ir a verlo. Imaginaros la cara de cada uno al decirle que era una ópera. De todas formas les dije a los niños que íbamos a ir todos como familia a verlo. Anoche, de camino a la ópera, los niños se preocupaban para saber cuánto tiempo tendrían que escuchar aquello, así que les dije que si querían tras el primer descanso podíamos marcharnos los que no quisieran ver el resto, ya que iba a durar como tres horas. Llegó el descanso a la hora después de empezar y pregunté a ver quién quería irse a casa, y lo gracioso es que ninguno quiso marcharse, querían quedarse hasta el final, les maravilló los intrumentos, la música, los trajes y los cantantes que incluían tres niños en algunas partes. Vamos, que han quedado fascinados, para mi sorpresa claro. Además el poder reconocer la música de algunas de las canciones también le ha gustado. A Michael le gusta mucho la música clásica, y cada mañana pone un CD en casa para despertar a los niños. Por fín está dando buenos resultados el apreciar la buena música.
Toda las canciones fueron cantadas en alemán, lo cual les hizo estar alerta a algunas de las palabras, aunque menos mal que lo tradujeron en una pantalla al castellano.
Ahora ya están esperando por volver, y como aquí hacen como tres actuaciones cada año, entre óperas y zarzuelas, están esperando ir a ver un zarzuela. Y como la fotógrafa tiene tanta "conexión" con nosotros, pues podemos asistir al último ensayo y nos nos afecta económicamente. :-) sino, imaginad comprar entradas para seis.